La causa suele ser una arteria situada en una posición anómala que comprime el nervio trigémino.
La persona sufre brotes repetidos de corta duración de dolor lacerante e intenso en la parte inferior de la cara.
Los médicos basan el diagnóstico en el dolor característico.
Ciertos medicamentos anticonvulsivos, algunos antidepresivos o el baclofeno alivian el dolor aunque a veces es necesaria la cirugía.
(Véase también Introducción a los pares craneales Introducción a los pares craneales Hay un total de doce pares de nervios, los llamados pares craneales, cuyo recorrido va directamente desde el encéfalo hasta diversos puntos de la cabeza, el cuello y el tronco. Algunos de estos... obtenga más información .)
La neuralgia del trigémino suele afectar principalmente a los adultos, especialmente a las personas mayores. Es más frecuente en mujeres.
Una causa frecuente de neuralgia del trigémino es
La posición anómala de una arteria, de forma que comprime el nervio trigémino cerca del lugar por el cual este sale del encéfalo.
En algunos casos, en las personas más jóvenes, la neuralgia del trigémino es consecuencia de una lesión neurológica debida a esclerosis múltiple Esclerosis múltiple En la esclerosis múltiple se dañan o destruyen zonas de mielina (la sustancia que recubre la mayoría de las fibras nerviosas) y las fibras nerviosas subyacentes en el cerebro, los nervios ópticos... obtenga más información . En raras ocasiones, la neuralgia del trigémino se produce como consecuencia de una compresión debida a un tumor, una conexión anormal entre las arterias y las venas (malformación arteriovenosa Malformaciones arteriovenosas cerebrales Una malformación arteriovenosa es una maraña de vasos sanguíneos dilatados que conectan directamente las arterias y las venas, sin pasar por los capilares (que normalmente son los que las conectan)... obtenga más información ) o un aneurisma Aneurismas de las arterias de los brazos, las piernas y el corazón Un aneurisma es una protuberancia (dilatación) en la pared de una arteria. (Véase también Aneurismas de las ramificaciones aórticas y Aneurismas cerebrales.) Los aneurismas pueden ocurrir en... obtenga más información (dilatación) en una arteria próxima a un nervio cercano al encéfalo.
Síntomas de la neuralgia del trigémino
El dolor debido a la neuralgia del trigémino puede aparecer espontáneamente pero con frecuencia se desencadena al tocar un punto específico (denominado punto gatillo) en la cara, los labios o la lengua, o al realizar determinadas actividades como lavarse los dientes o masticar. Se sienten brotes repetidos de corta duración de dolor punzante e intenso en cualquier parte de la zona inferior de la cara aunque lo más frecuente es que se sientan en la mejilla cerca de la nariz o en la mandíbula.
Habitualmente, solo se afecta un lado de la cara. El dolor suele durar unos segundos aunque llega a durar hasta 2 minutos. Si se repite hasta 100 veces al día, llega a ser incapacitante. Debido a que el dolor es intenso, las personas afectadas suelen hacer muecas, y por ello el trastorno se denomina a veces tic. Con bastante frecuencia el trastorno desaparece por sí mismo, aunque los episodios de la enfermedad reaparecen en muchos casos después de un largo intervalo sin dolor.
Diagnóstico de neuralgia del trigémino
Exploración neurológica
Resonancia magnética nuclear (RMN)
Aunque no existen pruebas específicas para identificar la neuralgia del trigémino, su dolor característico facilita a los médicos el diagnóstico. Se realiza una RMN del encéfalo para determinar si una arteria cruza el nervio. Esta información puede guiar la terapia futura. La RMN del encéfalo también puede determinar si un tumor está comprimiendo el nervio. Sin embargo, los médicos deben diferenciar la neuralgia del trigémino de otras posibles causas de dolor facial, como trastornos de la mandíbula, los dientes o los senos paranasales.
Tratamiento de la neuralgia del trigémino
Medicamentos anticonvulsivantes u otros
En ciertas ocasiones, intervención quirúrgica
Debido a que los episodios de dolor son breves y recurrentes, los analgésicos habituales no suelen ser útiles, pero otros medicamentos, especialmente ciertos medicamentos anticonvulsivos Medicamentos anticonvulsivantes Los trastornos convulsivos son alteraciones periódicas de la actividad eléctrica cerebral que derivan en algún grado de disfunción cerebral transitoria. Muchas personas tienen sensaciones raras... obtenga más información tomados por vía oral, pueden resultar beneficiosos. (Los medicamentos anticonvulsivos estabilizan las membranas de las células nerviosas.) Se suele probar primero con el medicamento anticonvulsivo carbamazepina. Si la carbamazepina, no es eficaz o produce efectos secundarios intolerables, se prescribe oxcarbazepina, lamotrigina, gabapentina o fenitoína, que son también fármacos anticonvulsivos.
Se utiliza en su lugar el baclofeno (un fármaco que se emplea para reducir los espasmos musculares) o la amitriptilina (un antidepresivo tricíclico Antidepresivos heterocíclicos (incluidos los tricíclicos) Se pueden indicar varios tipos de medicamentos para tratar la depresión: Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) Inhibidores de la recaptación de norepinefrina y dopamina... obtenga más información ). Si la amitriptilina tiene efectos secundarios intolerables, se puede probar otro antidepresivo tricíclico.
La inyección de toxina botulínica (utilizada para paralizar los músculos o para tratar las arrugas) cerca del área donde se siente dolor puede ayudar, pero la evidencia de su efectividad es limitada.
Si los episodios de dolor son frecuentes y graves, los médicos pueden usar un bloqueo nervioso para aliviar temporalmente el dolor hasta que surta efecto el medicamento administrado por vía oral. Se inyecta un anestésico en el nervio con objeto de bloquear su funcionamiento temporalmente.
Si el dolor sigue siendo intenso a pesar de la medicación, se puede realizar una intervención quirúrgica. Si la causa es la posición anómala de una arteria, el cirujano separa la arteria del nervio y coloca una pequeña esponja entre ambos. Este procedimiento (denominado descompresión vascular) suele aliviar el dolor durante muchos años. Si la causa es un tumor, se extirpa quirúrgicamente.
Si las personas afectadas presentan un dolor que no se alivia con fármacos y la cirugía parece demasiado arriesgada, se realiza un bloqueo nervioso para determinar si otros procedimientos podrían ser beneficiosos. Si el dolor se alivia con la inyección anestésica en el nervio, se podría, en algunos casos, aliviar el dolor de forma permanente seccionando el nervio. Estas interrupciones pueden implicar
Cortar el nervio quirúrgicamente
Seccionar el nervio con una sonda de radiofrecuencia (utilizando calor) o un bisturí de rayos gamma (gamma knife)
La compresión del nervio con un globo
La destrucción del nervio mediante la inyección de un agente como el glicerol en su interior
Sin embargo, la cirugía que alivia el dolor a menudo ocasiona un entumecimiento facial. Además, el dolor a menudo recurre. En consecuencia, las personas afectadas pueden necesitar someterse a muchos procedimientos. El haber recibido muchos procedimientos puede aumentar el riesgo de desarrollar un dolor intenso difícil de tratar.
Descomprimir un nervio
Cuando el dolor se deriva de la posición anómala de una arteria de forma que está comprimiendo un par craneal, se puede aliviar mediante una intervención quirúrgica denominada descompresión vascular. Este procedimiento se realiza como tratamiento de la neuralgia del trigémino, los espasmos hemifaciales o la neuralgia glosofaríngea. Si el nervio trigémino está comprimido, se rasura una zona en la parte posterior de la cabeza y se hace una incisión. El cirujano hace un pequeño orificio en el cráneo y levanta el borde del cerebro para exponer el nervio. A continuación, separa la arteria del nervio y coloca una pequeña esponja entre ambos. Se requiere anestesia general, pero el riesgo de efectos secundarios en relación con el procedimiento es bajo. Entre los efectos secundarios se encuentran entumecimiento facial, debilidad facial, visión doble, infección, hemorragias, alteraciones de la audición y del equilibrio y parálisis. Este procedimiento suele aliviar el dolor, aún así este reaparece en cerca del 15% de las personas. |