La psicosis se refiere a síntomas como delirios, alucinaciones, pensamiento y habla desorganizados y un comportamiento motor extraño e inapropiado (incluida la catatonia) que indica pérdida de contacto con la realidad.
Los médicos consideran el trastorno esquizoafectivo cuando las personas afectadas presentan tanto psicosis como síntomas del estado de ánimo (como depresión o manía). Los síntomas del estado de ánimo deben estar presentes durante más de la mitad de la duración total de la enfermedad y ocurrir junto con dos o más de los síntomas de esquizofrenia siguientes:
La diferenciación entre el trastorno esquizoafectivo y la esquizofrenia y los trastornos del estado de ánimo puede requerir una evaluación médica a largo plazo de los síntomas de la persona y la naturaleza de su progresión.
Tratamiento
El trastorno esquizoafectivo conduce a menudo a una discapacidad a largo plazo, por tanto las personas afectadas requieren con frecuencia un tratamiento integral, que incluye antipsicóticos, psicoterapia y apoyo comunitario.