Recomendaciones para el cribado del cáncer*

Procedimiento

Frecuencia

Cáncer de pulmón

Tomografía computarizada (TC) de baja dosis

Anualmente en personas que fuman o que dejaron de fumar hace menos de 15 años (y fumaron al menos una cierta cantidad) con una edad comprendida entre 50 y 80 años

Cáncer colorrectal

Análisis de heces para detectar sangre oculta o análisis inmunohistoquímico

Anualmente desde los 45 hasta los 75 años de edad †

Prueba de ADN en heces

Prueba de ADN en heces con múltiples objetivos cada 3 años desde los 45 hasta los 75 años†

Exploración sigmoidoscópica o colonoscópica

Cada 5 años, desde los 45 años hasta los 75 † (sigmoidoscopia)

Cada 10 años entre los 45 y los 75 años† de edad (colonoscopia)

Colonoscopia virtual

Cada 5 años desde los 45 años hasta los 75 †

Cáncer de próstata

Análisis de sangre para el antígeno prostático específico (PSA)

El beneficio de la revisión es incierto, por lo que los hombres de 50 años y más deben consultar los posibles riesgos y beneficios con el médico

Los hombres afroamericanos y los hombres cuyo padre o hermano desarrollaron cáncer de próstata antes de los 65 años deben tener esta consulta médica a los 45 años

Cáncer de cuello uterino

Prueba de Papanicoláu (citología cervicovaginal) y/o del virus del papiloma humano

Prueba de VPH solo o prueba de Papanicolaou más prueba de VPH en mujeres de 21 a 65 años†

La edad, la prueba de detección y las pautas de la organización médica indican la edad recomendada de inicio del cribado y la frecuencia de las pruebas de cribado, que varían entre cada 3 y cada 5 años

Cáncer de mama

Mamografía

Mujeres de 40 a 44 años de edad: opción de comenzar el cribado anual

Mujeres de 45 a 54 años: anualmente.

Mujeres ≥ 55 años: cada 2 años; el cribado continúa mientras la mujer se espere que viva por lo menos 10 años más

*Las recomendaciones para el cribado dependen de muchos factores. Estas recomendaciones de cribado, basadas principalmente en las de la American Cancer Society (Sociedad Estadounidense para el Cáncer) están dirigidas a personas con un riesgo promedio de cáncer que no presentan síntomas de cáncer. Si el riesgo es mayor, como cuando hay antecedentes familiares contundentes de ciertos tipos de cáncer o ya se ha padecido un cáncer con anterioridad, se recomienda realizar pruebas de cribado con más frecuencia o comenzar a efectuarlas a una edad más temprana. También son recomendables otras pruebas de cribado que no se mencionan aquí. Otras organizaciones, como los U.S. Preventive Services Task Force (Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de Estados Unidos), realizan recomendaciones ligeramente distintas, que se incluyen aquí, para algunos tipos de cáncer. El médico puede ayudar a los pacientes a decidir cuándo comenzar las pruebas de cribado y a qué análisis someterse.

† Algunas recomendaciones de cribado incluyen una edad de inicio y una de finalización. La decisión de continuar el cribado después de la edad de interrupción se basa en una conversación con un médico sobre los riesgos y beneficios.