Trastornos glomerulares primarios que pueden causar glomerulonefritis

Trastorno

Descripción

Pronóstico

Glomerulonefritis fibrilar

En esta enfermedad poco frecuente, se depositan proteínas anómalas alrededor de los glomérulos. También puede causar síndrome nefrótico.

El pronóstico es malo. En la mitad de las personas aparece un grave deterioro de la función renal (enfermedad renal en etapa terminal) en un periodo de 4 años. No está claro si el tratamiento (con corticoesteroides y otros inmunosupresores) resulta beneficioso.

Nefropatía por inmunoglobulina A (IgA)

La forma más común de glomerulonefritis en el mundo está causada por inmunocomplejos (combinaciones de antígenos y anticuerpos) que se depositan en el riñón. Los anticuerpos son proteínas producidas por el organismo para atacar moléculas específicas denominadas antígenos.

Por lo general, el trastorno progresa lentamente. En alrededor del 25% de las personas aparece enfermedad renal en etapa terminal después de 20 años. El trastorno evoluciona más lentamente en niños.

Glomerulonefritis membranoproliferativa

Este infrecuente tipo de glomerulonefritis ocurre principalmente entre las edades de 8 a 30 años. El trastorno es causado por inmunocomplejos (combinaciones de antígenos y anticuerpos) que se unen a los riñones, pero a veces la razón de que dichos complejos se unan a los riñones sigue siendo desconocida.

Si la causa es conocida y puede tratarse (p. ej., malaria o mieloma múltiple), es posible que ocurra una remisión parcial. En las personas en las que la causa permanece desconocida, los resultados no son tan buenos. Aproximadamente la mitad de las personas acaban teniendo una enfermedad renal en etapa terminal en los siguientes 10 años y el 90%, en los siguientes 20 años.

Glomerulonefritis primaria de progresión rápida

Este grupo de trastornos causa daño microscópico al glomérulo y progresa rápidamente. En algunos casos son causados por una infección u otro trastorno tratable. Para establecer el diagnóstico es necesario realizar una biopsia renal.

El pronóstico es malo. Al menos el 80% de las personas que no reciben tratamiento desarrollan enfermedad renal en etapa terminal en 6 meses. El pronóstico es mejor para las personas menores de 60 años y cuando un trastorno subyacente responsable de la glomerulonefritis responde al tratamiento.