• Posición: siempre hay que situar al bebé boca arriba, es decir, descansando sobre la espalda, tanto para dormir las siestas como por la noche. Dormir boca abajo, de lado y apoyándose no es seguro.

• Superficie: acostar al bebé sobre una superficie firme y plana, como un colchón de cuna certificado como seguro, cubierto por una sábana ajustable. La superficie no debe estar en un ángulo ni inclinada.

• Ropa de cama: mantenga objetos blandos, almohadas, protectores de cuna, juguetes de peluche, animales de peluche, mantas sueltas, sábanas no ajustadas, cubrecolchones, materiales similares a la piel, edredones, cobertores y mantas, pañales u objetos fuera del área de sueño del bebé.

• No fumar: no permitir que se fume tabaco o se vapee cerca del bebé. Se debe evitar fumar, consumir nicotina, alcohol, marihuana, opiáceos y fármacos o sustancias durante el embarazo y después del nacimiento. Los cuidadores no deben tomar drogas ni alcohol.

• Ubicación: situar el área de sueño del bebé cerca, pero separada, del lugar donde duermen los padres y otros niños. Se recomienda que los bebés duerman en la habitación de los padres/cuidadores, cerca de la cama de los padres/cuidadores, pero en una superficie separada diseñada para los bebés, idealmente durante los primeros 6 meses como mínimo.

• Chupetes: considere la posibilidad de ofrecer al bebé un chupete limpio y seco al acostarlo para dormir. Espere a dar un chupete a los lactantes que están amamantando hasta que la lactancia materna esté bien establecida.

• Temperatura: no permita que el bebé se caliente o se enfríe demasiado durante el sueño. Evite envolver al bebé o cubrirle la cabeza. Mantenga al bebé caliente usando capas de ropa en lugar de mantas y otras cubiertas. También se pueden usar mantas portátiles.

Para ayudar a prevenir que se aplanen algunas zonas de la cabeza del bebé, los bebés deben pasar algún rato boca abajo cuando están despiertos y alguien los vigila. Los padres/cuidadores pueden comenzar a poner al bebé boca abajo durante breves periodos de tiempo poco después del alta hospitalaria. El tiempo durante el que el bebé está boca abajo debe aumentarse regularmente hasta 15 a 30 minutos al día como mínimo cuando el bebé cumple 7 semanas de edad.

Para ayudar a que la cabeza del bebé se redondee, se debe cambiar la dirección en la que el niño está en la cuna cada semana, y no conviene dejar al bebé por mucho tiempo en asientos de automóviles, vehículos o hamacas.

Los monitores domiciliarios y los productos que dicen evitar el síndrome de muerte súbita del lactante no parecen ser útiles.