La nutrición puede afectar la respuesta del organismo a los fármacos; por el contrario, los fármacos puede afectar la nutrición del organismo.
Los alimentos pueden estimular, retardar o disminuir la absorción de fármacos. Los alimentos alteran la absorción de muchos antibióticos. Pueden modificar el metabolismo de los medicamentos; p. ej., las dietas ricas en proteínas pueden acelerar el metabolismo de ciertos fármacos mediante la estimulación del citocromo P-450. La ingestión de pomelos puede inhibir el citocromo P-450 34A. Esto puede causar desaceleración del metabolismo de algunos fármacos (p. ej., amiodarona, carbamazepina, ciclosporina, algunos bloqueantes de los canales de calcio, estatinas). Las dietas que alteran la flora bacteriana pueden afectar de manera considerable el metabolismo global de algunos fármacos.
Algunos alimentos afectan la respuesta del organismo a los fármacos. La tiramina, por ejemplo, es un componente del queso y un potente vasoconstrictor, y puede causar crisis hipertensivas en algunos pacientes que toman inhibidores de la monoaminooxidasa y consumen queso.
Las deficiencias nutricionales pueden afectar la absorción y el metabolismo de los fármacos. Las deficiencias graves de calorías y proteínas dsminuyen las concentraciones tisulares de enzimas y pueden alterar la respuesta a fármacos mediante la absorción o unión a proteínas y causar insuficiencia hepática. Los cambios en el aparato digestivo pueden afectar la absorción y modificar la respuesta al medicamento. La deficiencia de calcio, magnesio o cinc puede alterar el metabolismo del fármaco. La deficiencia de vitamina C disminuye la actividad de las enzimas que metabolizan los fármacos, sobre todo en los adultos mayores.
Muchos fármacos alteran el apetito, la absorción de alimentos y el metabolismo tisular (véase tabla Efectos de algunos medicamentos). Algunos (p. ej., la metoclopramida) aumentan la motilidad gastrointestinal y de esta forma disminuyen la absorción de los alimentos. Otros fármacos, (p. ej., los opioides y los anticolinérgicos) disminuyen la motilidad gastrointestinal. Algunos fármacos son mejor tolerados cuando se ingieren con las comidas.
Ciertos fármacos afectan el metabolismo mineral (véase tabla Posibles efectos de los fármacos sobre el metabolismo mineral). Algunos antibióticos, como las tetraciclinas, disminuyen la absorción de hierro, como también algunos alimentos (p. ej., verduras, té y salvado).
Algunos fármacos afectan la absorción o el metabolismo de las vitaminas (véase tabla Posibles efectos de la absorción o el metabolismo de las vitaminas).