El hombro (al contrario que la cadera o el codo) es una articulación inherentemente inestable; se ha asimilado a una bola de golf sobre su soporte (tee). Para mejorar la estabilidad estructural, la cavidad glenoidea (que anatómicamente es muy poco profunda) se profundiza más por el rodete, que es un material fibrocartilaginoso elástico unido alrededor del labio de la cavidad glenoidea. Esta estructura puede desgarrarse durante ejercicios atléticos, en especial durante los deportes de lanzamiento, o como consecuencia de un traumatismo cerrado cuando se cae sobre la extremidad superior extendida.
Signos y síntomas del desgarro del rodete glenoideo
Un desgarro del labrum glenoideo produce un dolor de hombros profundo durante el movimiento, en especial cuando se atrapa una pelota de béisbol. Este malestar puede estar acompañado por una sensación de dolor, hacer un click o golpeteo y una sensación de endurecimiento en el hombro.
Diagnóstico del desgarro del rodete glenoideo
Por lo general, con contraste RM
Inicialmente, debe realizarse un examen físico de todo el hombro y el cuello, pero con frecuencia es necesaria la derivación a un especialista debido a que a menudo la única manera de identificar la patología es a través de pruebas diagnósticas más sofisticadas (p. ej., RM con contraste).
Tratamiento del desgarro labral glenoideo
Terapia física
En ocasiones cirugía
La fisioterapia es el tratamiento inicial. Si los síntomas no mejoran con la fisioterapia y se ha confirmado el diagnóstico con RM, el desbridamiento quirúrgico o la reparación es el tratamiento de elección. Habitualmente, se realiza por vía artroscópica.