Inhibición de la actividad suprarrenal debido a corticoesteroides

Cuando se ingieren dosis abundantes de corticoesteroides, como la prednisona, puede producirse una inhibición funcional de las glándulas suprarrenales. Esta inhibición se debe a que las dosis altas de corticoesteroides evitan que el hipotálamo y la hipófisis produzcan las hormonas que normalmente estimulan la actividad suprarrenal.

Si la persona interrumpe de forma abrupta el tratamiento con corticoesteroides, el organismo no consigue restaurar la actividad suprarrenal con la rapidez necesaria y se produce una insuficiencia suprarrenal temporal (un tipo de insuficiencia suprarrenal secundaria). Además, cuando se sufre estrés, el organismo no es capaz de estimular la producción de los corticoesteroides adicionales necesarios.

Por lo tanto, nunca debe interrumpirse bruscamente el uso de corticoesteroides si se han consumido durante más de 2 o 3 semanas. De hecho, las dosis se reducen de forma gradual durante semanas y a veces meses.

Además, puede ser necesario aumentar la dosis en caso de enfermedad o de situaciones de estrés intenso durante el tratamiento con corticoesteroides. Si se enferma o se vive una situación de estrés intenso a las pocas semanas de haber disminuido o interrumpido el tratamiento con corticoesteroides, quizás deba reanudarse el tratamiento.