Infecciones bacterianas, como las causadas por Staphylococcus o Pseudomonas

Infecciones micobacterianas, como la tuberculosis

Infecciones víricas causadas por gripe, virus sincitial respiratorio o adenovirus

Objeto aspirado

Ganglios linfáticos agrandados

Tumor pulmonar

Cirugía de pulmón

Tapones de moco (por ejemplo, debido a la aspergilosis broncopulmonar alérgica)

Lesiones por vapores nocivos, gases o partículas

Inhalación de ácido estomacal y partículas de alimentos (por ejemplo, como consecuencia de una enfermedad por reflujo gastroesofágico grave o un trastorno de deglución)

Fibrosis quística

Discinesia ciliar primaria, incluido el síndrome de Kartagener

Déficit de alfa-1 antitripsina

Síndrome de Marfan

Síndromes de deficiencia de inmunoglobulina

Disfunción de los glóbulos blancos (leucocitos)

Deficiencias del complemento

Ciertos trastornos autoinmunitarios, como la artritis reumatoide, el síndrome de Sjögren, y la colitis ulcerosa

Infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH)

Panbronquiolitis difusa (caracterizada por la inflamación de los bronquiolos a lo largo de los pulmones y sinusitis crónica)