Hablar sin cuerdas vocales

El habla requiere una fuente de ondas sonoras (vibraciones) y un medio para convertir esas vibraciones en palabras. En condiciones fisiológicas las cuerdas vocales producen las vibraciones, que se convierten en palabras mediante la intervención de la lengua, el paladar y los labios. Los pacientes a los que se les han extirpado las cuerdas vocales pueden recuperar su voz si se les suministra una nueva fuente de vibraciones sonoras, porque su lengua, paladar y labios siguen siendo capaces de dar forma a esas nuevas vibraciones trasformándolas en palabras.

Las personas sin laringe pueden producir vibraciones sonoras mediante tres procedimientos. En las tres técnicas, el sonido se convierte en lenguaje mediante la garganta (faringe), el paladar, la lengua, los dientes y los labios.

Habla esofágica

  • No se requieren cirugía ni accesorios mecánicos

  • Se enseña a la persona a tragar aire hacia el esófago (vía desde la garganta hasta el estómago) y expulsarlo (como en un eructo) para producir un sonido

  • Difícil de aprender y puede ser difícil de comprender para quienes lo oyen

Punción traqueoesofágica

  • Válvula unidireccional implantada en un orificio creado mediante cirugía entre la tráquea y el esófago.

  • El aire penetra en la tráquea a través de una abertura en la parte frontal del cuello (estoma)

  • El habla se genera con el aire desviado hacia el esófago a través de la válvula mientras la persona exhala

  • Requiere mucha práctica y entrenamiento

  • A menudo acaba proporcionando la capacidad de hablar con facilidad y fluidez

  • La válvula requiere una limpieza diaria y debe ser reemplazada al cabo de muchos meses

  • Con algunas válvulas, la persona debe bloquear la abertura en la tráquea con un dedo para hablar

  • Existe el riesgo de que entren líquidos o alimentos en la tráquea de forma accidental si la válvula no funciona correctamente

Electrolaringe

  • Dispositivo vibratorio, provisto de batería, que actúa como una fuente de sonido cuando se apoya sobre el cuello

  • Produce un sonido mecánico artificial

  • Más fácil de usar y entender que el habla esofágica

  • Requiere baterías y debe llevarse allí donde vaya la persona

  • Requiere poco o ningún entrenamiento

  • Puede conllevar un fuerte estigma social para muchas personas