En ocasiones, puede detectarse cáncer en pacientes asintomáticos mediante exploraciones físicas regulares y estudios de detección sistemática. (Véase también Generalidades sobre el cáncer).
Como parte de la atención médica de rutina, deben efectuarse exploraciones físicas para investigar cánceres de tiroides, cavidad oral, piel, ganglios linfáticos, testículos, próstata, cuello uterino, y ovarios.
Las pruebas de detección sistemática son las que se practican en pacientes asintomáticos en riesgo. El fundamento es que el diagnóstico temprano puede reducir la mortalidad por cáncer al detectarlo en un estadio temprano y curable. La detección temprana puede permitir tratamiento menos radical y reducir costos. Los riesgos son resultados falsos positivos, que exigen estudios confirmatorios (p. ej., biopsia, endoscopia) que pueden provocar ansiedad, morbilidad y costos significativos; y los resutlados falsos negativos, que pueden dar una falsa sensación de seguridad que hace que los pacientes ignoren síntomas posteriores.
La detección sistemática de cáncer debe realizarse en las siguientes circunstancias:
-
Cuando pueden identificarse grupos de alto riesgo definidos (p. ej., personas con antecedentes familiares fuertes de cáncer de mama o de próstata)
-
Cuando el trastorno tiene un período asintomático durante el cual el tratamiento modificaría el pronóstico (cáncer de mama, cáncer de colon)
-
Cuando la morbilidad del trastorno es significativa si la detección se retrasa
-
Cuando está disponible una prueba de detección sensible, específica y rentable
Los esquemas de detección sistemática recomendados están en constante evolución sobre la base de los estudios en curso (véase tabla Procedimientos de detección sistemática en personas asintomáticas con riesgo medio según las recomendaciones de la American Cancer Society [Sociedad estadounidense contra el cáncer]). Las consideraciones actuales con respecto al examen de detección incluyen la comprensión cada vez mayor de que algunos hallazgos (particularmente en tejidos prostáticos y mamarios) que parecen cancerosos pueden no progresar a cáncer durante la vida que le resta a la persona. Por ejemplo, la detección sistemática de los niveles sanguíneos de antígeno prostático específico (PSA) en hombres y las mamografías de cribado en las mujeres pueden conducir a la obtención de una biopsia en la cual un anatomopatólogo considera la presencia de un cáncer que no se manifestará clínicamente como tal o que se manifestará como un cáncer pero que no afectará negativamente la supervivencia. En esos casos, las personas pueden recibir tratamientos para el cáncer (p. ej., cirugía, quimioterapia, radioterapia) que no los benefician.
El problema clave en la evaluación es cuántas personas necesitan ser examinadas para prevenir una muerte por cáncer y cuántas personas recibirán intervenciones innecesarias. Debido a estas complejidades, existe una gran controversia con respecto a quiénes deben ser examinados y a qué edades para qué tipos de cáncer. A continuación presentamos las recomendaciones de la American Cancer Society; las recomendaciones de otras organizaciones profesionales y organismos científicos (p. ej., la US Preventive Services Task Force, USPSTF) pueden diferir.
Procedimientos de detección sistemática en personas asintomáticas con riesgo* promedio recomendados por la American Cancer Society †
Tipo de cáncer |
Procedimiento |
Frecuencia |
Mama |
Mamografía |
Mujeres de 40 a 44 años: opción para comenzar la evaluación de cribado anual Mujeres de 45 a 54 años: anualmente Mujeres ≥ 55 años: cada 2 años; la evaluación continúa mientras la mujer tenga buena salud y se espera que viva al menos 10 años más |
Cáncer de cuello uterino |
Prueba de Papanicolaou (Pap) a veces con prueba para papilomavirus humano (HPV) |
Prueba de Papanicolaou cada 3 años entre los 21 y los 29 años Prueba de Papanicolaou más prueba de HPV cada 5 años entre los 30 y los 65 años o prueba de Papanicolaou cada 3 años Después de los 65 años, sin pruebas si la prueba anterior se llevó a cabo y los resultados fueron normales |
Cáncer de próstata |
Determinación en sangre de antígeno prostático específico |
Debido a que el beneficio de la revisión es incierto, el paciente y el médico deben discutir los riesgos y los posibles beneficios de la detección del cáncer de próstata a partir de los 50 años. |
Cáncer de recto y de colon |
Las pruebas de heces: sangre oculta en heces, prueba inmunoquímica fecal, o la prueba de ADN en heces o |
Anualmente a partir de los 50 años (cada 3 años para la prueba de DNA en materia fecal) |
|
Sigmoidoscopia flexible o |
Cada 5 años a partir de los 50 años de edad |
|
Colonoscopia o |
Cada 10 años a partir de los 50 años de edad |
|
Colonografía por TC |
Cada 5 años a partir de los 50 años de edad |
*Es posible que los pacientes con alto riesgo de contraer ciertos tipos de cáncer deban someterse a exámenes de cribado que siguen un programa diferente. |
||
†Deben efectuarse exámenes para cánceres de tiroides, cavidad oral, piel, ganglios linfáticos, testículos y ovarios durante la atención médica de rutina. |
||
Modificado de 2017 American Cancer Society Guidelines for the Early Detection of Cancer. |