(Véase también Generalidades sobre los traumatismos torácicos).
Neumotórax a tensión se desarrolla cuando un lesión pulmonar o la pared torácica es tal que permita que el aire entre a la cavidad pleural, pero no salga fuera de ella (de una válvula de un solo sentido). Como resultado, el aire se acumula y comprime el pulmón, eventualmente desplazar el mediastino, comprimiendo el pulmón contralateral, y el aumento de la presión intratorácica suficiente para disminuir el retorno venoso al corazón, provocando un shock. Estos efectos pueden desarrollarse rápidamente, sobre todo en los pacientes sometidos a ventilación con presión positiva.
Las causas incluyen la ventilación mecánica (más comúnmente) y neumotórax simple (sin complicaciones) con lesión pulmonar que no logra sellar un traumatismo torácico penetrante o cerrado o canulación venosa central fallida.
Signos y síntomas
Los signos y síntomas inicialmente son los del neumotórax simple (ver Neumotórax). A medida que aumenta la presión intratorácica, los pacientes desarrollan hipotensión, desviación traqueal y distensión de la vena del cuello. El hemitórax afectado es hiperresonante a la percusión y, a menudo se siente un poco distendido, tenso, y poco compresible a la palpación.
Diagnóstico
El neumotórax a tensión debe ser diagnosticado por hallazgos clínicos. El tratamiento no debe demorarse aguardando la confirmación radiológica. Aunque el taponamiento cardíaco también puede causar hipotensión,la distensión de la vena del cuello, y a veces dificultad respiratoria, el neumotórax a tensión puede diferenciarse clínicamente por su ausencia unilateral de los sonidos respiratorios e hiperresonancia a la percusión.
Tratamiento
El tratamiento es la descompresión inmediata mediante inserción de aguja de gran calibre (p. ej., 14- o calibre-16) en el segundo espacio intercostal en la línea media clavicular. El aire usualmente escapa. Debido a que la descompresión con aguja provoca un neumotórax simple, el tubo de toracostomía se debe hacer inmediatamente después.