Normalmente, una persona tiene dos riñones. El resto de las vías urinarias está constituido por:
Cada riñón produce constantemente orina, que circula luego por el uréter a una presión baja hasta la vejiga. Desde allí, la orina se expele a través de la uretra hacia el exterior del cuerpo, por el pene en los varones y por la vulva (la zona externa de los órganos genitales femeninos) en las mujeres. Generalmente, la orina no contiene bacterias ni otros microorganismos infecciosos.