No todos los signos deben estar presentes para un diagnóstico de trastorno del espectro autista, pero los niños deben presentar dificultades tanto en A como en B. Los signos pueden variar ampliamente en cuanto a gravedad, pero deben deteriorar el funcionamiento de los niños.
A. Dificultades en la comunicación y la interacción social:
Dificultad para relacionarse con los demás y compartir pensamientos y sentimientos
Dificultad en la comunicación no verbal (por ejemplo, el contacto visual, la comprensión y el uso de lenguaje corporal y expresiones faciales)
Dificultad en el desarrollo, el mantenimiento y la comprensión de las relaciones interpersonales
B. Patrones repetitivos y restringidos de comportamiento, intereses y/o actividades:
Movimientos o habla repetidos
Adhesión inflexible a rutinas y resistencia al cambio
Intereses muy restringidos e intensos
Respuesta muy aumentada o muy disminuida a las sensaciones físicas, como sabores, olores o texturas