¿Qué es la enterocolitis necrosante?
La enterocolitis necrosante es una enfermedad potencialmente mortal de los recién nacidos en la que partes de la mucosa intestinal se inflaman y mueren.
La enterocolitis necrosante ocurre con mayor frecuencia en bebés que son prematuros o que están muy enfermos
Su bebé puede tener la barriga hinchada, vomitar y evacuar heces (cacas) con sangre
Los médicos tratan la enterocolitis necrosante deteniendo la alimentación, usando un tubo de aspiración en el estómago y administrando alimentos y antibióticos por vena (IV)
La enterocolitis necrosante es potencialmente mortal, pero unos 3 de cada 4 bebés sobreviven
Después de sufrir enterocolitis necrosante, los bebés pueden presentar un intestino estrechado y necesitar cirugía
¿Qué causa la enterocolitis necrosante?
Los médicos no saben exactamente cuál es la causa de la enterocolitis necrosante, pero es probable que esté relacionada con:
Escaso flujo sanguíneo hacia el intestino
El flujo sanguíneo deficiente puede permitir que las bacterias que residen normalmente en el intestino ataquen la mucosa intestinal. La mucosa se inflama y sangra.
El mayor factor de riesgo para la enterocolitis necrosante es:
Nacer demasiado temprano (nacimiento prematuro)
Otras circunstancias que aumentan el riesgo de enterocolitis necrosante son:
Usted rompe aguas demasiado pronto (rotura de membranas preparto) y su bebé contrae una infección
El bebé es demasiado pequeño (pequeño para la edad gestacional)
Flujo sanguíneo insuficiente o concentraciones bajas de oxígeno en su bebé antes, durante o después del nacimiento (asfixia perinatal)
Defectos cardíacos congénitos
¿Cuáles son los síntomas del síndrome de la enterocolitis necrosante?
Los bebés con enterocolitis necrosante generalmente se ven muy enfermos. Por lo general, también presentan:
Hinchazón del abdomen
Rechazo de la alimentación
Vómitos con sangre o con un líquido de color verde, amarillo o rojo.
Sangre en las heces
¿Cuáles son las complicaciones de la enterocolitis necrosante?
La enterocolitis necrosante puede progresar hasta afectar toda la pared del intestino y causar un:
Orificio en el intestino (perforación intestinal)
El líquido y las bacterias se filtran a través del orificio hacia el abdomen de su hijo y causan una infección grave llamada peritonitis.
Una vez curada la enterocolitis necrosante, pueden quedar cicatrices en algunos puntos del intestino de su hijo. Al cabo de unos meses, la cicatrización puede cerrar parcialmente el intestino y dificultar el paso de los alimentos digeridos (obstrucción intestinal).
¿Cómo pueden saber los médicos si mi bebé sufre enterocolitis necrosante?
Los médicos sospechan enterocolitis necrosante según los síntomas de su bebé. Para asegurarse, solicitarán:
Radiografías del abdomen de su bebé
¿Cómo tratan los médicos la enterocolitis necrosante?
Los médicos tratan la enterocolitis necrosante mediante:
Interrumpir la alimentación regular para dejar que los intestinos descansen y sanen
Aporte de líquidos y nutrición por vena
Colocación de un tubo de succión en el estómago de su bebé para succionar los jugos gástricos y mantenerlos fuera del área inflamada
Administración de antibióticos por vía venosa
Cirugía, si su bebé desarrolla un orificio en el intestino
Más adelante, si el intestino de su bebé es estrecho y tiene cicatrices, los médicos practican una intervención quirúrgica para extirpar la sección estrecha.
¿Cómo puedo evitar que mi bebé sufra una enterocolitis necrosante?
Lo siguiente puede ayudar a prevenir la enterocolitis necrosante:
Alimentar a su bebé prematuro con leche materna en lugar de fórmula
Evitar la fórmula altamente concentrada
Evitar concentraciones bajas de oxígeno en la sangre de su bebé (el hospital lo controlará)