Mesotelioma

PorCarrie A. Redlich, MD, MPH, Yale Occupational and Environmental Medicine Program Yale School of Medicine;
Efia S. James, MD, MPH, Yale School of Medicine;Brian Linde, MD, MPH, Yale Occ and Env Medicine Program
Revisado/Modificado nov. 2023
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El mesotelioma es un cáncer poco frecuente del mesotelio, que es la membrana delgada y transparente que recubre la pleura y cubre y reviste el interior de la pared torácica y el abdomen.

  • Los síntomas más frecuentes son dolor torácico persistente y dificultad respiratoria.

  • Para establecer el diagnóstico de mesotelioma se utiliza una tomografía computarizada (TC) torácica y una biopsia pleural.

  • El mesotelioma se trata con cirugía, quimioterapia y/o radioterapia.

(Véase también Introducción a los trastornos relacionados con el amianto y Introducción a las enfermedades pulmonares ambientales y profesionales.)

El término mesotelioma (a veces llamado mesotelioma maligno) se refiere a un cáncer primario del mesotelio. El mesotelioma casi siempre está causado por la exposición al asbesto (amianto). El asbesto (amianto) es una familia de silicatos (minerales) naturales cuyas propiedades estructurales y de resistencia al calor son útiles en materiales de construcción y en construcción naval, frenos de automóviles y algunos tejidos.

El riesgo de mesotelioma depende del nivel de exposición al asbesto (amianto). Sin embargo, se sabe que ocurren casos a niveles bajos de exposición. Los mesoteliomas suelen aparecer entre 30 y 50 años después de la exposición. El riesgo es independiente de si la persona tiene antecedentes de tabaquismo.

Además de la exposición ocupacional, el mesotelioma puede ocurrir como resultado de la exposición para-ocupacional (o llevada a casa) al asbesto (amianto). El amianto se puede encontrar en concentraciones bajas en el aire, el agua y el suelo, pero este bajo nivel de exposición medioambiental no contribuye significativamente a la enfermedad humana.

¿Sabías que...?

  • Fumar no causa mesotelioma.

Síntomas del mesotelioma

El dolor torácico persistente y la dificultad respiratoria son los síntomas más frecuentes del mesotelioma. Si el mesotelioma se extiende a la pared torácica o a otras estructuras cercanas en el tórax, el sujeto puede tener dolor severo, ronquera, dificultad para tragar o hinchazón del abdomen.

Diagnóstico del mesotelioma

  • Antecedentes de exposición al amianto

  • Pruebas de imagen del tórax (radiografía, tomografía computarizada)

  • Análisis del líquido pleural o biopsia pleural

El establecimiento del diagnóstico de mesotelioma puede ser difícil para los médicos.

Las pruebas de imagen del tórax son cruciales para el diagnóstico.

Por lo general, se analiza una muestra de líquido del espacio pleural (citología del líquido pleural) y una muestra de tejido de la pleura (biopsia pleural) para buscar cambios característicos debido al mesotelioma.

El cribado del mesotelioma, una prueba para diagnosticar a las personas que han estado expuestas al asbesto (amianto) pero no presentan pruebas de mesotelioma, no está recomendado.

Tratamiento del mesotelioma

  • Tratamiento sintomático

  • Quimioterapia e inmunoterapia

El objetivo principal del tratamiento es la atención de apoyo y el alivio del dolor y la dificultad respiratoria. La eliminación del exceso de líquido entre las capas de la pleura puede aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida.

Los médicos pueden considerar la cirugía en personas con enfermedad en estadio inicial. En la enfermedad más avanzada, se emplea la cirugía para reducir el volumen de enfermedad visible o intentar eliminarla.

La radioterapia se puede utilizar para reducir el volumen del tumor y como medida paliativa para aliviar los síntomas.

La quimioterapia ha demostrado un beneficio limitado, con poco impacto en la supervivencia a largo plazo. La inmunoterapia (por ejemplo, el uso de inhibidores de punto de control como tremelimumab, pembrolizumab, nivolumab o ipilimumab) o la combinación de quimioterapia e inmunoterapia ha demostrado ser prometedora para ralentizar la progresión y mejorar la supervivencia a corto plazo, pero ha tenido un impacto limitado en la supervivencia a largo plazo.

Pronóstico del mesotelioma

El pronóstico sigue siendo malo a pesar de los nuevos enfoques de tratamiento, como la inmunoterapia. La mayoría de los enfermos viven 6 a 18 meses después de haberles diagnosticado el mesotelioma.

Prevención del mesotelioma

El mesotelioma y otras enfermedades causadas por inhalación de asbesto se pueden evitar disminuyendo al máximo el polvo y las fibras de asbesto. A pesar de que en la actualidad existe una menor exposición al asbesto (amianto), todavía se producen mesoteliomas en personas que estuvieron expuestas hasta hace 30 o 50 años.

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